Cada vez se utilizan más pantallas en las aulas. Como pizarras interactivas, sustituyen o complementan a la clásica pizarra de tiza y reemplazan por completo al retroproyector. Gracias a su amplia gama de funciones, los profesores pueden diseñar imágenes para la pizarra y poner a disposición de los alumnos material didáctico en formato digital. Los alumnos pueden mostrar los resultados de su trabajo de forma inalámbrica en la pantalla y debatirlos en clase.
Para clases de tamaño estándar, una pantalla de aula debe tener una diagonal de 75 pulgadas o más. También se pueden utilizar pantallas más pequeñas para clases más reducidas. En combinación con sistemas de pilones, PC OPS, barras de sonido, cámaras de documentos y, si es necesario, sistemas de videoconferencia, puede equipar su aula con tecnología digital preparada para el futuro.
